La vida de las mujeres embarazadas hoy corre más peligro en nuestro país. Así lo indican las cifras y así ha venido sucediendo desde que la Asamblea Nacional penalizó el aborto terapéutico.

Marcos Gómez es director de Amnistía Internacional en Venezuela y visitó Nicaragua para corroborar los datos sobre mortalidad materna del país, pues son considerados alarmantes.

Mañana, este organismo presentará un informe detallado sobre la situación de la salud de las mujeres en Nicaragua, que busca mejorar las políticas públicas enfocadas a ese sector. El Estado es uno de los principales “abusadores” contra las mujeres por no atender correctamente las obligaciones para con las mujeres.

Durante la visita de Amnistía Internacional el gobierno no fue el mejor anfitrión. El presidente Daniel Ortega no recibió a la delegación y el ministro de Salud, Guillermo González, médico de profesión, negó que la criminalización del aborto terapéutico sea un factor determinante en los casos de muertes de madres.

Gómez recomienda revalorar el papel de las ONG, implementar nuevas políticas públicas y reformar el Código Penal en lo referido al aborto terapéutico.

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