Mi Sendero de Sueños

Articulo enviado por Hèctor Avellàn
Una vez en alguna entrevista me preguntaron algo que al principio me pareció tonto, pero que luego me ayudó a explicarme o comprender cómo, los demás, contribuimos a hacer de este mundo un lugar en el que se pueda vivir sin miedo, y cómo contribuimos a la felicidad de los otros y a determinar cómo vivir la vida según nuestros deseos y nuestros sueños; me preguntaron qué era ser gay, para mí; yo no dudé en responder que es aquella sensación de ser observado todo el tiempo, aún estando en la soledad más absoluta; no es acostarse con alguien de tu mismo sexo, es la sensación de haber sido juzgados y condenados, como ha sido, aún antes de venir al mundo, aún antes de despertar a la vida y al amor.

Con la reciente creación de la procuraduría para la diversidad sexual en Nicaragua ha culminado una larga historia lucha, de un movimiento que nunca llegó a consolidarse como movimiento y que ahora pasa de vivir bajo la tutela de las ONG´s a burocratizarse bajo el amparo del gobierno. Como era de esperarse, esta iniciativa ha venido a reforzar posiciones fundamentalistas con respecto a los derechos humanos de miles de hombres y mujeres gay y lesbianas que contribuimos al desarrollo económico y social de Nicaragua.

Por parte del gobierno es una buena señal, de apertura a reconocer los derechos humanos de gay y lesbianas, en un hecho histórico y sin precedentes en el país, lo que nos pone al lado de otros países que han ido avanzando en este proceso. Para el Frente Sandinista es una muestra de su rica diversidad y su respeto por los derechos de todos y todas, aunque aún les debamos a las mujeres la restitución del derecho al aborto terapéutico, derecho que tiene que ver con reconocer la diversidad sexual como el derecho al propio cuerpo que es donde reside la libertad, y que hoy corresponde a la procuradora también como mujer pronunciarse al respecto de esta lucha.

Aunque es muy positivo que exista una instancia que vele y proteja los derechos humanos de esta comunidad en particular, la verdad es que muchos hemos aprendido a sobrevivir por nosotros mismos, luchando para que se nos respete en nuestras casas, en nuestras comunidades y en nuestros trabajos, sin tener que escondernos en identidades ajenas a nuestros deseos. Hemos sobrevivido sin apoyo de ningún estado, y aún bajo la ley que nos condenaba a dos años y medio de prisión y que sólo hace dos años fue eliminada por el gobierno del FSLN. Pero este proceso de restitución de derechos para la población sin distinción de ningún tipo y el reconocimiento de nuestros derechos y de nuestra existencia como comunidad, en cierta manera nos está poniendo en riesgo y exponiéndonos de nuevo al escarnio y la difamación hasta el infinito, a vivir señalados como hemos aprendido a vivir y es la lucha individual de cada quien la que al final determina la calidad de nuestra vida. Este proceso lastimosamente pasa por esta etapa, en la que se pone en riesgo la vida de muchos jóvenes que están descubriendo su identidad y se están atreviendo a ser ellos mismos, aún cuando están recibiendo tantos mensajes negativos acerca de su identidad y sus preferencias. La lucha está comenzando, como he podido advertir en emisoras de corte religioso, y estoy seguro que esto será tema de campaña de la derecha conservadora de nuestro país, la misma que en 1992 emitió la ley que nos condenaba a dos años y medio de prisión bajo el gobierno de Violeta Chamorro, y que como dije antes sólo fue eliminada hace dos años por el gobierno del FSLN.

Yo me pregunto qué denuncias podría recibir la compañera procuradora y cuáles serán los procedimientos o con qué contamos para defendernos ante qué tipo de agresiones, quién va a denunciar qué. No existe un trabajo de sensibilización fuerte con la sociedad ni con la misma comunidad que se debate entre el alcoholismo, la auto negación, la automarginación y el escándalo.

Los pastores evangélicos dedicaron carta a los diputados liberales solicitando no reelegir al Procurador Omar Cabezas, aduciendo que la creación de la procuraduría para la diversidad sexual era traer maldición al país, promover la sodomía y atentar contra la moral. Son palabras duras, llenas de odio y falsedad para dedicarlas a otros seres humanos en un contexto de perdón y armonía como se supone es el nacimiento de Jesús; los hombres gay y lesbianas aportamos al desarrollo económico y social del país, al contrario de los lideres religiosos que mantienen sumido al pueblo en la ignorancia y el oscurantismo.

La interpretación de la Biblia que hacen los fundamentalistas es perversa y pervertida; una lectura fría y atenta nos permite conocer la bella historia de amor adolescente entre David, quien después fuera Rey y Jonatan, hijo del Rey Saúl; o la historia hermosa de Ruth.

Cuando se habla de derechos humanos de gay y lesbianas, nos referimos al derecho a la propia identidad, el derecho a la felicidad y a la búsqueda del amor en esta tierra. Se trata del derecho a no vivir bajo el estigma, difamados hasta el infinito, de no sentir que vivimos en pecado y que Dios no nos quiere; es acerca de que esa realidad interior que vivimos, ese sendero de sueños no sea un largo camino de tropiezos, sino de ser felices en un mundo que fue creado sin distinción para todos y todas. Uno no decide a quién amar, es el amor el que nos elije, todos somos hijos de Dios y Dios nos ama a todos por igual; la flor no elije a quien dar su perfume, llueve igual para el ladrón que para el honesto.
Futente: barricada.com.ni

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