Primero que nada los padres se tienen que revisar, cómo están sus valores desde todo punto de vista, y ver la calidad de la relación que llevan con sus hijos, deben hacer un llamado de conciencia sobre su rol como padres en la crianza de los seres humanos.
«Yo diría que se trata de un problema multifactorial, en primera instancia los padres son los primeros educadores y hay que ver qué está pasando en nuestros hogares porque es allí donde comienza a crearse la identidad sexual, y son los padres los que dan la pauta de cómo criar a los hijos, lo que no es fácil, porque también hay que analizar cómo esos padres manejan su sexualidad, porque del mismo modo la transmitirán a sus hijos, los valores, conceptos y educación que manejan lo transmitirán, por eso el nivel cultural de los padres determina mucho estas situaciones», así opinó la sexóloga Alis Barrios, sobre el tema de cómo manejan los jóvenes de hoy su sexualidad.
Los padres actuales fueron jóvenes sexualmente tardíos y los jóvenes de ahora son muy precoces, ¿por qué?
-Antes la educación era más estricta, también estaba mediatizado el factor miedo, de alguna manera había un respeto con miedo y eso influyó y no había la información que hay ahora, era muy restringida y se le dejaba esa tarea a la escuela, antes los programas educativos tenían puericultura. Eso no quiere decir que antes no se iniciaban a temprana edad, porque incluso se casaban jóvenes pero no era tan frecuente, hoy día lo que veo es que hay demasiada permisividad, exceso de confianza, antes las madres estaban más en la casa hoy no sucede así, los hijos están solos o con otras personas, y los medios también influyen mucho, como la televisión, el cable, internet, y los padres no tienen cuidado con bloquear ciertos contenidos, y de hecho los canales pasan mucho contenido sexual actualmente.
A juicio de Barrios, estamos sujetos a la fisiología versus la sociocultura, «somos seres con un rango de variabilidad sexual, es decir, que somos potencialmente capaces de sentir, y ese sentir se va discriminando de acuerdo a la crianza y a la información que se le da al niño y a la niña, y por supuesto el factor sociocultural dará la pauta que se afianza más en la adolescencia. Si los niños no han tenido una buena base y una buena información, esto lo puede inducir a empezar a explorar antes qué es eso de sentir, y lo incita a no quedarse atrás en relación a los del grupo, hay que estar al mismo nivel, las chicas buscan relaciones para no quedarse atrás y lo mismo pasa con el chico y el paradigma del macho que tenga más parejas, ya no hay respeto, es sólo por hacerlo, y todavía existe aquello de la «prueba de amor», en chicas que tienen un hogar que no tiene una comunicación operativa, donde el amor no está presente o hay muchas peleas, alcohol, maltrato hacia la mujer, hace que los adolescentes busquen refugio en drogas, delincuencia y otras opciones, buscar afecto o apoyo en otras personas».

Homosexualidad
«Otro detalle que estamos viendo, -resaltó Barrios- junto a los altos índices de embarazos y de contagios de Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) en adolescentes están los altos índices de homosexualidad en ambos sexos, ¡tengo casos de casos!. El lesbianismo siempre ha existido pero era más solapado, se hablaba más de la homosexualidad masculina, pero hoy día no, la femenina ha salido más al ruedo, y en el caso de los colegios de un solo sexo predominan las tendencias a la homosexualidad, está comprobado, porque se facilita la situación y se restringe la libertad».
Explicó que la primera fase es la experimentación, «el joven vive experiencia y depende del entorno familiar, de su crianza y valores que siga o no con esa experiencia, eso es lo del joven, experimentar y probar, en la búsqueda de su identidad como persona y sentirse bien consigo mismo y acoplarse en la sociedad, su base y su personalidad determinan la línea que continúe, por eso es necesaria vigilancia constante en la educación y la orientación sexual».

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