«Nos sentimos tratadas como si fuéramos estúpidas»
Julia y MarÃa -nombres ficticios, para conservar su anonimato, ya que trabajan de cara al público- están casadas desde el 30 de septiembre de 2006. Cuando ocurrió el episodio llevaban más de una hora recorriendo las instalaciones del Colegio SEK-El Castillo, un centro privado situado en las afueras de Madrid, en el que la cuota mensual de infantil es de 590 euros. No les pusieron ningún pero. Además, la visita se habÃa concertado después de haber cruzado diversos correos electrónicos con el centro en el que se les aseguró que sà habÃa plazas libres para sus hijas. El último, el 7 de julio. En las semanas siguientes, dos parejas de amigos llamaron al colegio preguntando si habÃa plazas para esa misma edad y a todos les contestaron por escrito que sÃ. Al último, el 29 de agosto. A ellas les siguen diciendo (la última respuesta es del pasado lunes) que están en lista de espera. Continuar….