La luna creciente brilla con normalidad sobre estos cerros de plata, pero nada es normal; mi voz se ha ido, cada vez que intento hablar, se vienen a mi cabeza las palabras de mi abuela: Cipota no grites tanto que te vas a desgaliar!!!! Así que supongo que ahora diría que estoy desgaliyada y por eso tengo tantas ganas de escribir, para sacar de adentro toda la indignación y dolor pero también la esperanza que me provoca ver a mi pueblo…a mi hogar metido en estas camisas. Seis días han pasado del golpe de estado y aun los militares están en las calles, tenemos declarado un estado de sitio, las instituciones públicas están “resguardadas por militares”, siguen tirándonos bombas y gases, hay cateos en los autobuses de ruta urbana, están reclutando a la fuerza a niños hasta de 11 años, los espacios públicos están cerrados por “seguridad” del gobierno golpista, los medios de comunicación están intervenidos, a los bancos “se les va el sistema,” las organizaciones de mujeres están siendo vigiladas y ayer hasta tuvimos policías en las afueras mientras hacíamos las mantas…

El cansancio de todas las que hemos estado de frente gritando, corriendo, bailando, escribiendo… resistiendo, es inmenso pero ahí estamos las feministas valientes dando la cara de frente. Todos los días, desde ese vergonzoso 28 de junio, a pesar de la opresión, miles y miles de hondureñas y hondureños salimos a las calles a defender nuestro derecho. La creatividad nos da pincelazos de luz y ahora nos acompañan tambores, inciensos y caras poderosas que nos recuerdan las raíces indígenas diversas que tenemos. Las brujas y ancestras se unen a la voz de las miles y miles de mujeres en el mundo que se han solidarizado con nosotras y que día a día han mostrado su repudio a semejante violación de todos los derechos universales. También, cientos de compañeras y compañeros han tenido que viajar desde muy lejos, a ratos caminando, a ratos a jalón, a ratos en bus… La travesía ha sido complicada y ahora que sabemos mejor lo que está pasando al interior del país la tristeza, la rabia y la indignación aumentan considerablemente pero la cantidad de personas que estamos en las calles no es poca y la forma valiente y pacifica en la que defendemos nuestra soberanía tampoco. Mañana viene el presidente electo y han decretado estado de sitio desde hoy a las 10 de la noche hasta mañana a las seis de la tarde, así que cualquier cosa puede pasar porque ahora mismo, todos nuestros derechos constitucionales son inexistentes.

Dicen que el siete es un número mágico y escribo este mensaje con la esperanza de que el mundo entero se de cuenta que este es un NEOGOLPE DE ESTADO en el que confluyen las fuerzas y la brutalidad militares con el capital, la derecha extrema, la política, las iglesias, la empresa privada, las transnacionales y probablemente otras fuerzas que no alcanzo a ver. Es por eso que desde el centro de Centroamérica resistimos, porque a partir del pasado 28 de junio, ningún gobierno o estado elegido legítimamente por el pueblo y las mayorías estará a salvo.

Daysi Flores

¡¡PORQUE TODAS SOMOS HONDURAS!!