El presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, ha vetado la ley que despenaliza el aborto en el paÃs, aprobada esta semana por el Parlamento. Su firma está acompañada por la de los ministros de Turismo, Héctor Lescano, y Salud Pública, MarÃa Julia Muñoz, también contrarios al proyecto.
La Ley de Salud Sexual y Reproductiva se aprobó el pasado por 17 votos (todos de la coalición de izquierda Frente Amplio) contra 11 del Partido Nacional (Blancos) y dos de los Colorados. El texto autoriza a la mujer a decidir la interrupción de su embarazo en las 12 primeras semanas de gestación». Se calcula que en Uruguay se practican unos 33.000 abortos clandestinos al año.
Vázquez, oncólogo de formación, que subió al poder en 2004 y formó el primer Gobierno de izquierda de la historia de Uruguay, habÃa advertido en numerosas ocasiones de que utilizarÃa su derecho al veto a la legalización del aborto «por razones de orden filosófico y biológico».
Para levantar el veto del presidente se requiere el apoyo de tres quintas partes de los integrantes de cada cámara, senadores y diputados, algo que es bastante difÃcil de lograr. Según la norma constitucional, en caso de que el Parlamento no rechace expresamente la observación del poder ejecutivo a los 30 dÃas, el veto quedará automáticamente confirmado.